Otras galletitas ricas, ricas, esta vez llevan jengibre para darle un toque diferente, en la receta original el jengibre es en polvo que queda aromático solamente, pero yo se lo he puesto fresco rallado y le ha dado un toque picante que nos encanta.
Estas galletitas se las dedico a mi sobrina Laura que hoy es su cumpleaños y a todas las Dolores, Dolors Lola, Loli, ....
INGREDIENTES (para 40-50 galletas):
3/4 de taza de harina de coco (90 gr.)
1/4 de taza de azúcar de abedul , u otro edulcorante bajo en carbohidratos (80 gr.)
1 cucharada de especias para pastel de calabaza
1 cucharadita de jengibre fresco molido
1 cucharadita de canela molida
1 cucharadita de polvo de hornear
1 pizca de sal
3 huevos grandes
1/3 de taza de mantequilla o de aceite de coco fundido (85 gr.)
1 cucharada de semillas de lino
2-4 cucharadas de agua si la masa está demasiado seca
Mezclar todos los ingredientes secos: harina de coco, edulcorante, polvo de hornear, especias de pastel de calabaza, jengibre molido y canela.
Añadir los huevos y la mantequilla de coco derretida y mezclar con una cuchara o las manos. Añadir agua si la masa está demasiado seca (yo no le he añadido).
Cubrir o envolver la masa con una envoltura de plástico y colocar en el refrigerador mínimo 1 hora.
Después de 1 hora, precalentar el horno a 180ºC.
Retirar la masa de la nevera y coger cucharadas de la masa y hacer bolas, que aplastaremos sobre el papel de hornear puesto en la bandeja del horno, hasta que tenga un espesor de alrededor de 1/2 cm.
Colocar en el horno y hornear durante unos 15-20 minutos o hasta que las bordes estén ligeramente dorados. Retirar del horno y dejar que las galletas enfríen en una rejilla.
Dejarlas lisas o decorar con chocolate negro. Almacenar en un recipiente hermético hasta por una semana o congelar durante más tiempo.
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